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Ta acabas de comprometer y empiezas a buscar el vestido para tu boda. ¿Cuál es una de las primeras ideas que pasa por tu cabeza? Si eres como la mayoría de las chicas, este será que tienes que ponerte a dieta para estar perfecta en tu gran día. Quitarte esos kilos que crees que te sobran suele ser una prioridad para muchas novias y, sin embargo, ponerse a dieta antes de la boda tiene muchos inconvenientes que hacen que no sea una buena idea. ¿Quieres sabe cuáles son? ¡Te los contamos!

1. Perder peso es algo que suele poner de mal humor a la gente

Suma eso al estrés que toda novia tiene durante los preparativos de su enlace y el resultado será un periodo de tiempo bastante largo en el que estarás siempre estresada y de bastante mal humor. Es muy probable que incremente las discusiones con tu chico (precisamente por el mal humor que ya hemos citado).

2. Habrá que ajustar muchas más veces el vestido

Con el desafío añadido que eso supone de cara a que quede perfectamente ajustado a tu silueta.

3. La comida se convertirá en el eje de todo el proceso

En lugar de centrarte en lo divertido de los preparativos y en disfrutar de ellos

4. Puedes dañar tu autoestima

El estrés de la boda puede hacer que perder peso se convierta en algo más complicado de lo que en principio habías planeado y eso puede dañar tu autoestima. Recuerda que tu chico te quiere tal y como eres y que si antes no tenías ninguna razón para querer perder peso, tampoco ahora debería haberla.

5. Puede que el resultado no sea el que soñabas

Perder peso no supone necesariamente ser una novia más atractiva. De hecho, puede que el resultado final te sorprenda, ya que la primera vez que te probaste tu vestido tenías un peso y unas formas distintas. ¡No te arriesgues a que pierda parte de su gracia junto a esos kilos que te has quitado de encima.

6. Antes de la boda te esperan muchos acontecimientos sociales

Visitas a tus amigos para entregar invitaciones, despedidas de soltera, comidas o cenas con vuestros familiares. No las disfrutarás igual si tienes que controlar lo que comes en todo momento.

7. Un régimen o un incremento del ejercicio harán que te sientas más cansada

Preparar una boda supone mucho trabajo, por lo que necesitarás contar con toda la energía posible.

Ahora que conoces estas razones para no ponerte a dieta antes de tu boda, ¿aún crees que es una buena idea? ¡Cuéntanos tu experiencia!

Fuente: docctisimo